Hoy toca pensar y mirar. Abrir caminos. Siempre parece poco, nuestra mente occidental y consumista quiere ver resultados, adquirir cosas sólidas. Pero lo primero es ver, y pensar, y descubrir la rica y compleja realidad que nos rodea y que nosotros simplificamos enormemente.Hoy voy a salir a mirar personas. Voy a dedicar el día a mirar rostros. No a ver si son bonitos o feos, si son morenos o rubios/catires/monos/... Voy a mirar los rostros y los atuendos y la manera de vestir y de comportarse de las personas.
Simplemente eso.
Así de sencillo.
Entrenar mis ojos para ver la maravilla de la persona.
Porque una persona humana no es como el resto de cosas o animales que veo todo el día. Es mucho más. Es incluso más que un ángel.
Una persona es alguien como yo. Pero totalmente distinto a mí e irrepetible. Es un frágil milagro, que une lo biológico y lo espiritual en una macedonia de sabores irrepetibles.Mira a las personas. No las juzgues, y no serás juzgado. Escúchalas.
Quiérelas.
Ámalas.
Verás, poco a poco nacerá el cariño y el amor.
que bueno es descubrir que Dios nos ha dado la inteligencia y la capacidad de admirarnos de deslumbrarnos ante las cosas y las personas de fuera... aun mas las que viven junto a nosotros... estoy agradecido con Dios por desvelar ante mis ojos su amor y su bondad a través de mi prógimo pues le veo en el rostro de mis amigos y compañeros...
ResponderEliminar...caminaré en busca del de Belén...
Gracias por tu agudo comentario. Dios bendiga tus ojo con esta luz nueva que nos hace ver la maravilla de estar rodeado de personas que Dios nos envía para aprender a amar!
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